24 octubre, 2007

Travesuras en el colegio

Todos lo saben y me da lo mismo lo que digan algunas personas: salir del colegio fue lo mejor que me pasó en la vida. Nunca me gustó esa mierda. Los profesores se portaron pésimo, especialmente mi profesora jefe Miryam Ortega. Odio al colegio y no me interesa lo que pasa dentro de él. Es más, si tuviera un hijo jamás lo matricularía ahí.

Pero hay algo que extraño mucho, las cagadas que hacíamos en el colegio. Mientras ayer subía una foto en que tenía 15 años me dio un poco de tristeza, de pena, de nostalgia. Le mandé el link al Sopapo para que posteara y nos pusimos a conversar de todas las tonteras, maldades, batallas de naranja y miles de cosas que hicimos.

Empecemos.

Cuando el Riveros copió en una prueba de historia. Él tenía la fila A y copió la B enterita. Su nota fue un 2.

Cuando Jancito hacía las pruebas y la movía por todo el curso. A mí me llegaban como de los terceros después del Eduardo y el Beno, y a veces, en las prueba de biología era yo quien movía.

Cuando al Beno le redacté una prueba de un libro en voz alta. Fue una de las millones de pruebas que le soplé.

Cuando salimos campeones de los recreos en tercero medio.

Los carretes fomes de colegio.

Pola House, el pub de los días viernes después de clases luego de que hayan multado a nuestro bar de iniciación llamado Gussa por dejar entrar a todo los SSCC.

Cuando el Piña quemó al huaso con un lápiz Bic en el laboratorio de química.

Cuando el mono agarraba pal hueveo a la profesora de química. “Oeee Momo”.

La guerra de peos alemanes entre Los Pesa y nuestro curso. Debajo de la mesa del profesor cayó una botella con peo alemán y la cara del tío Panchito cuando empezó a sentir el olor.

Cuando la Romina se puso a llorar en medio de un debate en que habían mil personas.

El “Vikingo Noche” en la casa del primo. Qué manera de tomar, de volar, de frío también. La caña al otro día era impresionante y a las 1 de la tarde estábamos todos durmiendo.

Los romances entre Felipe Bustamante y la Gaby, el Jancito y la Gaby, Sergio Hernández y Pamela Castro, Pamela Castro y Eduardo Bustos, Eduardo Bustos y Macarena Ibarra, Marcelo Rojas y Rayén Jara, Andrés Basarte y Valentina Camus, Alexander Duff y Claudia Troncoso, Felipe Bustamante y Constanza Zerega… etc etc etc.

Juan Cillero como líder del Clan Dezz jugando Age 24 horas diarias y llegando a clases a sentarse con Victoria Jara para competir en quien se ganaba más anotaciones negativas.

Las constantes cimarras de Roberto Flores y Daniel Piña, siempre apañados por algún miembro del curso como Beno, yo, Mono…

Patricio Morales, alias el mimo. Tan bueno para hablar que no contestaba ni la lista.

Cuando el Beno prendió una botella de alcohol conmigo y el Eduardo en la sala de clases. Tremendas llamas salían y el fuego no se apagaba, así que tuvimos que usar la mochila del mono para controlar la cosa. También resultó quemada.

Cuando estábamos en octavo, a Eduardo Bustos se le ocurrió echarle el cuerpo encima a los aros de básquet del gimnasio. Todos lo seguimos y se formó una competencia de quien lo movía más. Insatisfecho con su desempeño, Eduardo se tiró con todo su poder y lo quebró, provocando que el profe lo retara y lo amenazara con pagar $400.000 por los daños, lo que nunca hizo.

La gira de Estudios, con el famoso Caleuche y la pata enyesada del Eduardo quien era el tercer tripulante del carro espacial que arrendábamos con Álvaro Benito.

Las preguntas inteligentes de Felipe Aravena, apodado posteriormente Chiste o Chistoso.

La voz del pingüino.

La Vivi y la Vicky descubriendo la vocación, ser parvularias. Ambas eran expertas en cambiar pañales.

Misión imposible en la inspectoría. Prefiero ser implícito para no tener problemas xD.

La “broma” que le hicieron a la Urbina. Esto es cuando a fin de clases un agilao.com le tiró un frasco de tinta cara de raja, quedando sancionado sin la posibilidad de dar la PSU.

Los partidos de fútbol en la parcela.

Los retiros espirituales donde iban alrededor de 2 personas.

Cuando el Sopapo se cayó con la Pola a la piscina para el cumpleaños de ella. Por tratar de tirarla, el ideoso de esta genialidad salió todo mojado.

Cuando estábamos en octavo y el Sopapo llegaba pasado a cigarro a clases.

Las Juntas de Machos en la casa del Mono.

Las Cony House’s y los cabezazos del Javier González a la pared.

El Sergio con la Kiska.

Las Guerras de naranja, papeles, poroteras, botellas y cáscaras de plátanos durante más de 4 años.

Cuando dimos vuelta la sala para una clase de física creo. La profesora tocaba la puerta para poder entrar a la sala y no la pescábamos haciéndonos los dormidos. Después llegó Pato Miranda entero brígido.

Heraldo Carvacho y el Jah Rastafari. Victoria Jara y Jebús.

Las Clases de filosofías con la tía sexo y sus famosos orgasmos.

Etcétera, me da paja seguir escribiendo. Si se acuerdan comenten y escriban.

Saludos.